lunes, 25 de diciembre de 2017

Delirio navideño

... y esto de pensar acerca de que Las Cosas son al revés, es empezar a ver la Imagen Verdadera (lo que suele llamarse “Realidad”), como ocurre con la cámara fotográfica o con el ojo: las imágenes aparecen al revés dentro de la cámara o el ojo… pero el “mecanismo” de ver las da vuelta. Así que, el proceso de Ver La Realidad incluye “dar vuelta al derecho” lo que, por mandato familiar-social, llega al revés. Y recordemos que “Navidad” es el nacimiento de un Niño Interior (Un Salvador): el aspecto psicológico que tiene el Poder de Ver de Verdad, después de poner “al derecho” lo que en principio viene “al revés”. Por ej.: si el amor-bebé, al adultecer se torna aguante virtuoso o rescatador compulsivo, en queja o demanda, en odio o resentimiento… es porque fue “parido” al revés. Lo ingenioso de la vida es que ese mismo amor mal-parido ¡puede nacer nuevamente!

Feliz Navidad-Nacimiento en Vos, del Salvador (del amor), 
Elena

martes, 5 de diciembre de 2017


Cuatro condiciones convergen para convertir un acto en un arte, las mismas cuatro condiciones inherentes a cualquier arte: nuevo conocimiento, práctica del nuevo conocimiento, atención con concentración y paciencia para verificar resultados. Es en este sentido que tanto los excesos al comer y al amar pueden ser exitosamente superados: el límite como arte.

Amar y comer, amar y fumar, amar y drogarse. La manera de amar en su sentido más amplio: el modo de vincularse articulado por el modo del límite.

La manera de amar es la base. Luego la sustancia.

Es sencillo percibir el exceso de lo material, ¿pero el exceso al amar cuya presión hace necesario el alivio con la sustancia?

Identificar cómo este exceso se manifiesta y conocer el límite como arte en su doble función: amar y sustancia.

La compulsión a comer, con o sin exceso de peso. En la superación, un tesoro escondido: amar como arte.